No eres para mí ni yo para ti

el

bn

Las tormentas ya me avisaron, que ni tus yemas delos dedos me acariciarían en verano.

Yo, mientras tanto, viví de un  sueño, de retenerte en mi habitación y esposarte a mi espalda.

Ya me advirtieron que no me mirarías como a ella,

ni de reojo,

que de tu boca no saldría,

ni un te quiero,

ni siquiera un ‘te echo de menos’.

Porque sí, porque no eres para mí,

porque soy adicta a los imposibles menos cuando te dan la espalda,

menos cuando apuñalan el corazón y desangran mis entrañas.

No soy para ti, lo supe cuando te vi con ella de la mano desde mi ventana, yo alimentándome de esperanzas hechas añicos y tu besando otras bocas.

Soy adicta a lo difícil, a pensar que podíamos ser ese nosotros que desde pequeña apunté en un diario extraviado, me vicié a tus mejillas el día que te cruzaste por mi camino, sin saber, que bajo esa camisa se escondía un amor que no era para mí.

Viviendo de burbujas que estallaron al verte pasar,

ni si quiera fuimos ni seremos ese cuento breve que estaría dispuesta a leer mil veces más.

Nada,

Nunca.

Los amores imposibles se aferran al recuerdo, te dan las buenas noches y cuando despiertas ya no están.

Lo mismo ocurrió contigo, sin quererlo me vicié a ti desde el balcón, y qué bonitas vistas.

Y sí, llegó el día en que supe que lo nuestro no podía ser, pero no puedo evitar imaginarnos.

De amores imposibles se construye el mundo,

y también mi corazón,

ese que susurra en sueños tu nombre,

tu apellido

2 Comentarios Agrega el tuyo

Deja una respuesta

Introduce tus datos o haz clic en un icono para iniciar sesión:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Imagen de Twitter

Estás comentando usando tu cuenta de Twitter. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s