Hay parejas que tienen casi todo en contra para llegar a serlo pero que cuando se comen los miedos son más felices que el resto. Te quiero Lucas y te quise antes de que empezaras a sentir por mi. 

Que no hay fronteras en este mundo y que si quieres Madagascar será nuestra casa en la que ser nosotros sin necesidad de escondernos.

La vida casi te me lleva por delante y lo que sentí en ese momento solo quiero recordarlo porque me di cuenta de que si, de que estaba locamente enamorada de ti.

Idas y venidas que hicieron todo un poco cuesta arriba pero nadie dijo que el amor fuera fácil (y a nosotros nos gusta lo complicado siempre). 

Quizás terceras personas nublaron lo nuestro, pero que quieres que bendiga, por un momento pensé que era imposible, que debíamos hacer vidas separadas aún recordándonos todo, que nos merecíamos buscar y encontrar otros corazones en los que sentirnos cómodos…. eso creía.

 Pero el amor es como un imán que no controlas y no sé cómo, me dejé llevar y acabé volviendo a ti. Si tu saltas yo salto, si tu te quemas yo ardo, si a ti te pegan un tiro yo sangro. 

Al final te vas a enamorar… y si, No se pueden controlar los sentimientos, hay amores destinados a encontrarse e historias que tienen su final escrito. 

Tú, Lucas, protagonista del cuento de mi vida y yo, una Sara que creció, maduró y aprendió a querer a aa alguien gracias a ti.

Si, puedo afirmar que existen los finales felices y nosotros nos merecíamos uno así.

Te quiero.

Aunque me fuese…¿crees que podría olvidarme de ti?

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